La actividad económica argentina creció un 5% en mayo

La actividad económica argentina mostró un notable repunte en mayo, según los datos que publicó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). El Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) registró un crecimiento interanual del 5%, lo que consolidó una tendencia positiva en el desempeño productivo del país.

Este incremento se dio en el marco de una mejora acumulada del 6,1% entre enero y mayo, lo que representó un «sólido avance» en lo que va del año. El Gobierno de Javier Milei atribuyó estos resultados al éxito de su plan económico, diseñado para revertir la «grave crisis económica heredada del kirchnerismo».

El informe del INDEC también destacó que 13 de los sectores relevados mostraron subas interanuales, lo que reflejó una recuperación generalizada de la economía. Entre los sectores con mejor desempeño, la intermediación financiera creció un 25,8% interanual, y la pesca, un 12,2%.

El sector de comercio mayorista, minorista y reparaciones registró una suba del 10%, siendo este último el de mayor incidencia positiva en la variación general del EMAE. La industria manufacturera, otro sector clave, mostró una expansión del 5% interanual, lo que consolidó su rol como motor productivo. Estas cifras evidenciaron una reactivación cada vez más visible, especialmente en las áreas vinculadas con la producción, la inversión y el comercio.

Además, el Gobierno de Javier Milei proyectó una continuidad de esta tendencia positiva. El anticipo del Presupuesto 2026 estimó un crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) del 5,5% para 2025, una cifra que incluso superó las expectativas del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central.

Dentro de esas proyecciones, destacaron los avances esperados en los sectores agropecuario (2,1%), industrial (5,3%) y comercial (7,6%), acompañados por una mejora tanto en la producción de bienes como en los servicios. Por el lado de la demanda, las previsiones también fueron alentadoras: el Gobierno espera que el consumo privado crezca un 7,2%, el consumo público un 5%, y que la inversión repunte un notable 22,7%. Las exportaciones e importaciones también mostrarían signos de dinamismo, en línea con el repunte general de la economía.

Aunque el dato desestacionalizado de mayo mostró una leve caída del 0,1% respecto de abril, esto se dio luego de un abril que tuvo un aumento corregido del 1,8%. En el marco de una economía que transita una fase de normalización y consolidación, este pequeño retroceso mensual no empañó el panorama general, que es «claramente positivo».

De esta manera, la economía argentina transita 2025 con indicadores sólidos y una proyección optimista, en la que diversos sectores muestran dinamismo y confianza en la continuidad de la recuperación lograda por la administración libertaria.